Un grupo de voluntarios, en gran parte miembros de la Asociación de Pescadores Cares-Deva, se
calzaron las botas de goma y dedicaron la mañana de ayer a recoger la basura que se acumulaba en el río Casaño. Gracias a ellos las márgenes de este arroyo a su paso por Arenas de Cabrales lucen ahora totalmente limpias. En esta ocasión contaron con la colaboración de Cogersa, que desarrolla una campaña de limpieza de espacios naturales con ayuda de voluntarios por toda Asturias
La falta de compromiso por parte de las administraciones es lo que ha llevado a que los vecinos busquen alternativas para mantener limpias las aguas del Casaño. Nicolás Sánchez, presidente del colectivo de pescadores, explicaba que «como el Principado no colabora y Confederación Hidrográfica no lo limpia, tenemos que convocar nosotros a la gente y hacerlo. Parece que es la única manera de mantener limpios los ríos».
Y es que no es la primera vez que los vecinos de Cabrales limpian el Casaño. Ya durante el mes de abril batieron las márgenes del río. «Entonces el caudal era mayor y dificultó la tarea», recuerda. Durante toda la mañana adecentaron las orillas del río a su paso por Arenas y también el pozo de la Oración, alrededor del Naranjo de Bulnes y en dirección a Carreña.
Por su parte, Cogersa les dotó de bolsas y puso a su disposición contenedores industriales que posteriormente recogerá y clasificará en una de sus plantas. Esta actuación se enmarca en un proyecto que se está desarrollando en zonas verdes de todo el Principado, donde se crean grupos de voluntarios para la limpieza de las mismas y posteriormente se elaboran informes sobre el impacto real de los residuos en la región. Hasta ahora ya se ha realizado en el Parque Nacional de Redes y en el río Nalón en Laviana. Alea Pulgar, coordinadora de Taxus, empresa dependiente de Cogersa, participó ayer en las tareas de mantenimiento del río Casaño junto a los voluntarios de la asociación de pescadores y explicó que «donde más basura se suele encontrar es cerca de los núcleos de población». El área de Cabrales coincide con los pueblos de Arenas, Poo y Carreña.
Finalizadas las labores de limpieza el balance de ayer fue positivo. «Casi llenamos el contenedor industrial», explicaba Nicolás Sánchez. Pese a que en esta ocasión la afluencia de voluntarios fue menor que otras veces, recogieron multitud de residuos. «Plásticos, mucha chatarra e incluso una bicicleta», indica el pescador. A su vez Sánchez quiso hacer un llamamiento a la conciencia medioambiental de sus vecinos, porque como mantiene el cabraliego «es muy fácil que nos lo den todo hecho, pero en esta ocasión pedimos compromiso y la gente no responde». Tienen fijada otra batida en la que esperan obtener más refuerzos, será el día 14 de septiembre y en esta salida limpiarán el río Cares a su paso por Peñamellera Alta y Baja.
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